Parece el título de un tango, pero no, era el altisonante y grandilocuente eslogan de la candidatura Junts pel Sí, la que nos había prometido llevarnos a la Arcadia feliz. No soy la única que se ha manifestado en el sentido en que lo haré, pero aún a riesgo de repetir argumentos ya esgrimidos, no me resisto a dar mi visión de las «históricas elecciones catalanas» celebradas ayer, 27 de septiembre, que tenían que dar paso a una nueva República Catalana.
Resulta que sí, que Junts pel Sí ha ganado las elecciones con 62 escaños, pero ¿es este un resultado como para salir eufóricos como si hubieran tomado el Palacio de Invierno? No sólo han utilizado la sede del Gobierno de la Generalitat para hacer su campaña, sino que han contado con la artillería pesada de algunos medios de comunicación (casi todos subvencionados por la Generalitat), han añadido a la lista a un flamante izquierdista y a dos lideresas de la sociedad civil que han llenado las calles de Barcelona de banderas y de gente; han colocado como farolillo rojo al gran Pep Guardiola y como cabeza de lista por Girona a Llach, de quien me sé todas sus canciones, empezando por la inolvidable Verges, 50. En fín, después de más de cuatro años de matraca, de absorber a los escindidos del PSC y parte de los de Unió; después de gastarse un montón de pasta en vallas en el metro, autobuses, plafones, banderolas, folletos, etc. por tierra, mar y aire; después de autoconvenserse de que en Cataluña sólo hay independentistas y que los demás somos muertos vivientes… todo para perder 9 escaños respecto a los que tenían las dos formaciones en las pasadas elecciones y quedarse con el 47,8% de los votos (y eso contanto el porcentaje de la CUP).
Si tuviera un poco de honradez, lo que Mas tendría que hacer sería dimitir, pues los 62 escaños que ha conseguido con Esquerra Republicana los obtuvo CiU solita en las elecciones del 2010, donde por cierto su socio sólo consiguió 10, sumando en total 72… 10 más de lo que juntos han conseguido ahora…. ¿Y a eso le llaman ganar?
Hagan las matemáticas que quieran, retuerzan los datos como les dé la gana, realicen las componendas que deseen, y sigan con su Hoja de Ruta… que todo eso no va a cambiar la realidad….y es que la mayoría de la ciudadanía no se ha dejado seducir por los cantos de sirena de Mas y compañía. Para ese viaje no necesitábamos alforjas.